LOS CHICOS DEL HOGAR AQUÍ ES DE POZO DEL INDIO VISITARON A SOCIAL

Los chicos del Hogar Escuela de Niños Aquí Es del paraje-desvío Pozo del Indio, en la noche del domingo pasado y para el partido del Rojo ante Santa Rita de Esquina, Corrientes, por el Torneo Federal de Básquetbol, fueron traídos por la Municipalidad de Las Breñas para que en el microestadio Ángel Pértile presencien el encuentro, respondiendo a la invitación que los mismos jugadores le habían formulado el Día de Reyes Magos cuando el 6 de enero los integrantes del plantel se dirigieron hasta Pozo del Indio, a diez kilómetros al norte de esta ciudad entre Las Breñas y Corzuela, para pasar unas dos horas jugando con ellos regalándoles pelotas de básquetbol y de fútbol.

Maravillados por la sorpresivamente visita, los diecinueve niños y adolescentes del Hogar Aquí Es, se entusiasmaron con el básquetbol y es así que tuvieron su noche de baloncesto viendo jugar desde la tribuna a sus regaleros de Reyes Magos, lástima que la alegría no fue completa porque Social perdió el partido por un simple 76 a 75.

En el entretiempo y tal como lo habían programado, los chicos descendieron al parqué y se sacaron una foto con el equipo de primera división de Social Las Breñas sosteniendo el cartel identificatorio realizado por ellos mismos para la oportunidad. Una actividad a la mejor manera del Programa Básquetbol sin Fronteras de la NBA y la FIBA, que promociona el básquetbol en todo el mundo con sus principales jugadores haciéndolo primeramente en sus países de origen y luego en todo el mundo.

Julio Ruiz, Marcos Lueg, Ignacio Luna, Esteban Pistochini, José Szpilard, Federico Herrera, Cristian Aguilar; Miguel Pikaluk y el director técnico Luís Pikaluk, pudieron sentirse salvando distancias, como si fueran Yao Ming; Manu Ginobili, Dirk Nowitski, Andrei Kirilenko, Dikembe Mutombo y Vlade Divac, con un día de solidaridad en su propia casa recibiendo a los chicos del Hogar de Niños Aquí Es, los que para ello fueron transportados por la unidad móvil utilitaria de la Municipalidad.

Fuente: Mauro Laurenza